¿Lo bueno de hacerse mayor?

 Aunque te parezca mentira, hay algunas cosas buenas en hacerse mayor.

¡Te lo contamos!

• Cada mañana sabes que estás viva porque, cuando te levantas, todo te cruje…

Y si un día al despertar no te cruje nada, piensas que es gracias a los complementos que tomas para engañar al cuerpo: el colágeno, la glucosamina, el omega…

Pero, en realidad, lo que mejor funciona es el ¡baile! 💃 Para olvidar los crujidos… y para recordarte que sigues viva.

• Ya no tienes que seguir la moda…

Abres el baúl, buscas ropa de los 60, sales a la calle y ¡tú la inspiras!

Las hombreras, los vaqueros de tiro alto y los pendientes enormes vuelven… ¡como tú!

Solo que ahora los llevas con más seguridad, más color y sin miedo al qué dirán.

• Te dicen que empiezas a olvidar cosas… y sí, es cierto.

Olvidas el móvil al salir de casa, por ejemplo. ¡Y así disfrutas un rato de paz con las amigas!

También olvidas el sentido de la paciencia, porque ya te has dado cuenta de que no estás para tonterías.
Ahora procuras escapar de cualquier situación que ponga a prueba tu calma.

• Y también dicen que, con los años, las mujeres nos volvemos invisibles…

Y sí, ¡invisibles para algunos!

Pero también invisibles para las críticas, los prejuicios y las tonterías.

Porque llega un momento en que ya no necesitas que te vean…
Te basta con verte tú, saber quién eres y disfrutar de la vida.

Y, por si fuera poco, también hemos aprendido a entender mejor las matemáticas:

lo que no suma, lo restamos de nuestra vida.
Y en esta cuenta, nos quedamos con las amigas… que siempre suman. 💕

▶ Vídeo en nuestro canal de YouTube:  ¿Lo bueno de hacerse mayor?

– Marian

Este blog comparte experiencias personales y aprendizajes propios. No soy profesional de la salud; si tienes dudas médicas, consulta siempre a un especialista.

Nota: Todas las imágenes de este blog han sido generadas mediante inteligencia artificial y no representan a personas reales.